El intendente electo de Renca denunció la falta de respuesta para una transición ordenada: “Es una obligación institucional”

El intendente electo de Renca, Luis Altamirano hizo pública su preocupación a través de sus redes sociales, revelando que dos solicitudes formales enviadas con el fin de iniciar un proceso de transición institucional no han obtenido respuesta. Esta inacción, a su juicio, impide una entrega de mando organizada y clara.

Enfatizó la relevancia de acceder a datos fundamentales sobre la situación económica, financiera, patrimonial, de recursos humanos y de infraestructura del Municipio. Según expuso en su publicación en redes sociales, esta información es “clave para garantizar una transición ordenada, transparente y respetuosa del mandato popular”.

El dirigente electo reiteró su “predisposición al diálogo y a coordinar un encuentro” con la jefa comunal, Romina Peralta que permita cumplir con los principios democráticos y asegurar una administración responsable desde el primer día.

Insistió en que esta instancia no es un simple formalismo, sino una “obligación institucional” que debe honrarse por el bienestar de Renca y sus habitantes.

Su mensaje concluyó con la esperanza de que su llamado sea atendido con la seriedad que la situación amerita.[Batacazo poggista doble en Renca: tras 42 años perdió el PJ y fue desbancada la familia Peralta que manejó el pueblo en los últimos 24 años]LEÉ TAMBIÉN:
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Para respaldar su denuncia, Altamirano adjuntó las dos cartas enviadas a Peralta. La primera, con fecha del 13 de junio de 2023, expresaba con carácter de urgencia la necesidad de una reunión formal para abordar los asuntos centrales del proceso de cambio de gestión. En dicho documento, Altamirano subrayó la indispensabilidad de obtener “precisiones detalladas y documentadas” sobre el estado del Municipio.

Advirtió que la carencia de esta información no sólo comprometería la transparencia, sino que dificultaría seriamente el inicio de una administración planificada. Culminó solicitando a la funcionaria fijar una fecha a la brevedad posible para concretar el encuentro, haciendo hincapié en que “la transición no es una cortesía, sino una obligación institucional”.

Una segunda nota, enviada el 18 de julio de 2025, reiteró el pedido de reunión para tratar las cuestiones inherentes al traspaso institucional, con miras al comienzo de su futura gestión.

En esta ocasión, Altamirano volvió a resaltar la responsabilidad que implica asumir el Gobierno municipal y la necesidad de interiorizarse sobre los mismos aspectos ya mencionados.

Expresó que esta información es “esencial para planificar de forma ordenada, transparente y eficaz las acciones de Gobierno”.

El escrito finalizó con un agradecimiento por la coordinación de una fecha y horario convenientes, buscando garantizar un proceso de transición adecuado y respetuoso de las instituciones democráticas.

El Chorrillero