La especialista en astrología psicológica y evolutiva, María Romina Coronel, nos abre hacia el conocimiento del tiempo de Virgo que es tierra fértil para todo aquel potencial tan propio y singular que hemos descubierto bajo el signo de Leo. Una columna para leer y poner orden en nuestro propósito de vida.
El signo de Virgo es la segunda constelación de Tierra en la Mandala astrológica.
Virgo viene a ser la Tierra fértil para todo aquel potencial tan propio y singular que hemos descubierto en nosotros bajo el signo de Leo en este último tiempo.
.
Ahora es el Sol quien hace su entrada a este nueva dimensión de Consciencia en la que estamos invitados a poder sembrar, cultivar, cosechar y poner al Servicio esos dones y talentos latentes en nuestra Esencia semilla.
El arquetipo de la constelación de Virgo es la figura de la Virgen, de la Sacerdotisa, de la Chamana, de la Mujer medicina que despliega y abre así en cada uno de nosotros nuestra dimensión más Sabia y Ancestral capaz de convertirnos en verdaderos Alquimistas y así poder integrar el Cielo a la Tierra.
.
La Sabiduría de la Sacerdotisa es impecable a la hora de acompañar los pasos de así quien lo permita y lo elige. Su mejor Medicina reside en poder integrar y poner en perfecta coherencia los tantos cuerpos que nos componen: cuerpo físico, mental, emocional, etérico, astral y álmico. Y, es a partir de éste nuevo Eje, de este Nuevo Orden en que los mismos comienzan a moverse, a orquestar una danza tan propia a la que llamamos en Unidad: Espíritu.
.
¿Cuál es tu Nuevo Orden interno? Pregunta el Sol en Virgo.