Agregó que se trata de un comunicado que golpea sobretodo al sindicato y que pretende infundir la incertidumbre en los trabajadores. Comparó esta situación con la fábula del pastor y el lobo, ya que la amenaza es una práctica habitual de la empresa y que al despido de los veinte trabajadores no se han sumado otros.
Desde el pasado mes de agosto se encuentran realizando medidas de fuerza, con distintas maneras de manifestarse, desde cortes intermitentes de ruta o quedarse en la puerta de la fábrica sin ingresar. Han tenido numerosas reuniones en el programa Relaciones Laborales, en la útima ocasión la empresa no se hizo presente.