La joven fotoreportera dijo que su comienzo en la profesión fue a sus quince años en eventos sociales y que posteriormente se volcó a las coberturas periodísticas. Manifestó que le gusta captar imágenes casuales, de la vida cotidiana.
Contó que los fotógrafos cuentan con una mirada distinta, que pueden observar cosas que el común de la gente no percibe fácilmente. A la hora de elegir, se queda con aquellas que plasman relaciones entre familiares o amigos y que pasarán a la posteridad haciendo posible recordar un momento que se vuelve inolvidable.