La obra de reparaciones generales del histórico edificio, ubicado sobre avenida Mitre, ha ingresado en la etapa final, que incluyen tareas de pintura y arreglos menores.
Diego Canta Jefe jefe del Programa Infraestructura Escolar
Durante el verano pasado, la casa de estudios estaba siendo intervenida en cuanto a determinadas deficiencias en muros y techos, como también en la renovación de sanitarios y recambio de cableado eléctrico y demás labores. De hecho, hasta el 26 de enero se estimaba que para marzo el lugar estaría listo para el desarrollo del ciclo lectivo 2023. Sin embargo, durante la noche de ese jueves todo cambió para Villa Mercedes, cuando uno de los temporales más violentos de que se tenga memoria asoló la ciudad con granizo en seco de gran tamaño y fuertes ráfagas. Domicilios, vehículos, edificios públicos y casi toda la urbe registró cuantiosos daños, y el “Colegio Nacional”, como aún se le llama a la institución, no quedó exenta.
Diego Canta Jefe jefe del Programa Infraestructura Escolar, recordó que “esa tormenta cambió todos los planes, pues no solo destruyó todos los arreglos que se habían hecho hasta el momento, sino que mucho más. Con los tejados rotos, la filtración afectó a todo el edificio, desde el techo y las paredes hasta los pisos, el sistema eléctrico quedó anulado. Se tuvo que hacer todo desde el inicio, comenzar de cero”.
El edificio quedó con mucha humedad, rajaduras en algunas paredes, revoques nuevos que cayeron y, con respecto a los techos, debimos hacerlos a todos de nuevo. Para ello ya no usamos tejas, sino chapas inyectadas con poliuretano; estos techos son más resistentes, demandan menos mantenimiento y las prestaciones térmicas son mucho mejores. Entramos en la última etapa, que son los detalles y pintura, trabajos que llevarán unos dos meses, tal vez menos, así que pronto el colegio podrá reabrir sus puertas”, sostuvo Canta.