La espera terminó y este jueves en Auckland arrancó una nueva Copa del Mundo de Fútbol Femenino. En Eden Park, Nueva Zelanda, uno de los dos organizadores de la gran cita, y Noruega se enfrentaron en el primer partido de la fase de grupos y dieron inicio al certamen.
En un partido muy peleado, en donde no hubo un claro favorito durante los 90 minutos, las Football Ferns (como se conoce a las jugadoras neozelandesas) sacaron ventaja gracias al gol de Hannah Wilkinson en el inicio del segundo tiempo.
A través de una gran jugada colectiva de las anfitrionas, que inició desde su propio arco y en el que rápidamente llegaron a la zona de ataque con buenos pases en profundidad, Wilkinson rompió la defensa y apareció sin marca en el área para aprovechar el centro de Jacqui Hand y poner el 1-0.
El combinado local no se conformó con esa ventaja y buscó el segundo, algo que casi logra en el cierre del encuentro. A falta de dos minutos para el final, y tras un chequeo del VAR, Nueva Zelanda tuvo un penal a favor para sentenciar la historia.
Ria Percival fue la encargada de la ejecución. La defensora del Tottenham acomodó la pelota, miró a la arquera y sacó un tremendo remate. Sin embargo, en su intento de colocarla cerca del ángulo, terminó disparando contra el travesaño y el partido finalmente acabó con la ventaja mínima.
La tragedia que opacó el inicio del Mundial
Previo a la inauguración del certamen ocurrió un hecho trágico en las calles de Auckland. En las cercanías a uno de los principales Fan Fest de la ciudad, un tiroteo acabó con la vida de tres hinchas. Es por esto, que se realizó un minuto de silencio en el estadio.
La fiesta de apertura
Antes de que ruede la pelota y como de costumbre, se llevó a cabo la ceremonia de inauguración del que será el primer Mundial Femenino de la historia en ser organizado por dos países (Australia y Nueva Zelanda) ante más de 42 mil personas que se acercaron al estadio Eden Park.
La apertura se centró en los colores, la música y en resaltar la cultura de los pueblos originarios de las naciones anfitrionas. Además, estuvieron presentes la cantante neozelandesa conocida como Benee y la rapera australiana Mallrat, interpretando la canción oficial del certamen: "Do it again".
Durante la ceremonia, hubieron bailarinas representando a los 32 países que competirán por ser campeones del mundo, incluyendo a la Selección Argentina que integra el Grupo G junto a Suecia, Sudáfrica e Italia.