El azul es una coloración verdaderamente extraña para un vertebrado. Entre las razones para ello se encuentra que el azul, biológicamente hablando, es un pigmento muy costoso de producir. Además, la mayoría de los mamíferos, por ejemplo, tienen un sistema de visión de los colores bastante simple, por lo que cuando se trata de mamíferos, la naturaleza sencillamente no emplea demasiados recursos en colores brillantes.
Una excepción a esta regla es Dendrobates azureus, también conocida como la rana de veneno azul o rana flecha azul, las cuales, al igual que otras representantes de su familia, hacen gala de una coloración aposemática, indicativa de su toxicidad.