Tras la primera noche con la sentencia conocida en Melchor Romero, a qué cárcel pueden ir los imputados por el crimen de Fernando. Además, el camino de la apelación que se asoma en el juicio.
El juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa tuvo su cierre este lunes cuando el Tribunal de Dolores decidió otorgarle la cadena perpetua para 5 de los 8 rugbiers que lo mataron brutalmente a la salida de un boliche en Villa Gesell en 2020. Sin embargo, ahora empiezan a surgir dudas sobre cómo será su futuro en la cárcel como también las instancias judiciales que restan hasta tener una condena firme.
Por lo pronto, a la salida del Tribunal, uno de los abogados de la Familia Báez Sosa, Fabián Améndola, habló con Vía País y señaló que “tal vez por piedad no hayan terminado de alcanzar el grado de justicia que se requería”, confirmando que irán en busca de la apelación al Tribunal de Casación.
Sin embargo, otra de las grandes dudas que pasa tanto por los familiares de la víctima como por el resto de la opinión pública es qué pasará en el futuro de los rugbiers. Es decir, con la conocida condena, ahora la gran duda pasa por ver si van a permanecer todos juntos o se separarán.
Qué cárceles pueden ser destinos
Una de las primeras cuestiones a tener en cuenta son los cupos que tienen las alcaidías. Expertos en cárceles y conocedores de cómo funciona el servicio penitenciario, explicaban que no es fácil conseguir ocho cupos para cualquiera de los penales bonaerenses.
Durante los primeros días tras la sentencia, pasarán sus días en la Alcaidía N°2 de Melchor Romero, la penitenciaría en la que estuvieron los últimos tres años en celdas de a dos, alejados del resto de la población carcelaria. Este penal solo está disponible para aquellos presos que no tuvieron una condena aún.
Sin embargo, ahora resta saber qué puede pasar en el futuro de los rugbiers, teniendo en cuenta que cinco permanecerán cerca de 35 años en prisión, mientras que otros tres solo 15 años. En ese sentido, sería lo más lógico, según cuentan, que se separe el grupo.
En ese marco, aparece el Complejo Penitenciario de Campana que sería la opción más lógica pensando que las familias viven en Zárate que está al lado de esa localidad. Pero, en ese penal solo podrían quedarse Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi, que tienen una condena menor.
En el caso de Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi deberán pasar a una prisión de máxima seguridad. Allí aparecen las opciones de Sierra Chica que tiene una población de 2.254 presos, cuando tiene una capacidad de 943, o el penal de San Martín en la unidad 48 que tiene una capacidad para 336 presos y alberga una población actual de 537.