El reporte final tras 18 meses de investigación apunta al republicano como máximo responsable de la conspiración para revertir el resultado electoral
La causa principal del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 fue "un hombre", Donald Trump. Así lo indica el reporte final del comité de la Cámara de Representantes que investiga los graves incidentes en Washington que se saldaron con cinco personas fallecidas y 140 heridos. Detrás de la turba enfervorecida que entró a la fuerza en la sede del Congreso de Estados Unidos había "un plan con varias partes para revertir las elecciones presidenciales" que perdió frente a Joe Biden en 2020, un entramado que contó con el apoyo explícito de varios colaboradores.
Entre las recomendaciones de la comisión, compuesta por siete congresistas demócratas y dos republicanos, está el solicitar al Congreso que impida que tanto Trump como el resto de sus colaboradores en la trama vuelvan a ejercer cargo público alguno, lo que arruinaría los sueños de reelección del neoyorquino. La decimocuarta enmienda de la Constitución permite inhabilitar a personas involucradas en un acto de insurrección o que asistieron a enemigos del país.
"La evidencia ha llevado a una conclusión absoluta y directa: la causa central del 6 de enero fue un hombre, el ex presidente Donald Trump, a quien muchos otros siguieron", afirma un resumen del informe. "Ninguno de los eventos del 6 de enero habrían sucedido sin él", poniendo en peligro "la vida de legisladores estadounidenses".
La pelota está ahora en el tejado del Departamento de Justicia, al que la comisión recomendó presentar cuatro cargos criminales contra Trump: insurrección, obstrucción de un proceso oficial del Congreso, conspiración para cometer fraude a Estados Unidos y conspiración para difundir falsedades electorales.
El reporte completo de 845 páginas incluye partes de la más de mil entrevistas realizadas en el curso de los 18 meses de investigación, un informe en ocho capítulos en el que se revela, entre otras cosas, que varios parlamentarios republicanos enviaron mensajes al jefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, pidiendo con urgencia la intervención de Trump para frenar el asalto. "Por favor, dígale al presidente que calme a la gente", indicó Marjorie Taylor Greene, republicana por Georgia.
Lo que el comité no pudo corroborar con un segundo testimonio fue el intento de Trump trató de agarrar el volante del coche presidencial para tratar de llegar hasta el Capitolio y unirse a sus seguidores. El reporte especifica que los agentes del Servicio Secreto en el coche no pudieron ratificar la historia de Cassidy Hutchison, asistente de Meadows, que aseguró a la comisión que Tony Ornato, director asistente del Servicio Secreto, así se lo contó.
La investigación también da cuenta de las presiones ejercidas sobre Hutchinson para que guardara silencio y no comprometiera a Trump. Sin embargo, su testimonio al comité en junio contra el presidente fue explosivo, implicando al republicano en la trama para revertir el resultado electoral y apoyando las marchas del 6 de enero.