En los hogares argentinos faltan frutas, verduras, cereales, harinas integrales, legumbres, granos y fermentados y sobran grasas, papa, harinas, panificados y bebidas dulces en cantidades. Según los datos de un reciente estudio, apenas el 11% de la población cuenta con una alimentación de calidad. En el otro extremo se ubica un 39% de los hogares que están llevando una dieta deficiente. La mala alimentación abarca a todos los grupos socioeconómicos.
Estos datos son recientes y fueron desgranados durante la presentación del programa Comer Mejor, una iniciativa para promover la educación alimentaria y nutricional realizado por un equipo de la Universidad Católica Argentina (UCA), a través de su carrera de Nutrición, la Red Argentina de Bancos de Alimentos (RedBdeA) y el Centro de Estudios sobre Políticas y Economía de la Alimentación (CEPEA). Las estimaciones fueron realizadas a partir de relevamientos como la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (ENNYS 2) y la de Gastos de los hogares del INDEC.
Además, según el informe, la dieta de los argentinos “es poco sustentable (en particular en emisión de gases de efecto invernadero). Ello refuerza la necesidad de un cambio dietario basado en razones de salud humana y ambiental”.
En los próximos días, el programa estará disponible en línea en el sitio www.comermejor.com.ar y en las redes sociales
El objetivo del plan es generar “cambios sostenibles que mejoren las brechas de calidad nutricional y diversifiquen la alimentación de la población argentina considerando sus diversas particularidades”. Según se informó durante la presentación, el foco inicial serán los alimentos y grupos alimentarios más deficitarios y sin embargo fuente importante de nutrientes esenciales como verduras, frutas, legumbres, granos, cereales y harinas integrales, yogur y alimentos fermentados. El programa también abordará las prácticas culinarias, de compra y aprovechamiento de los alimentos que junto con una dieta diversa cumplen un rol clave en un cambio dietario saludable y sustentable.
Los especialistas que presentaron la iniciativa, Mariana Albornoz y Sergio Britos de CEPEA; Natascha Hinsch, de RedBdeA y Patricio Kenny, de la Carrera de Nutrición de la UCA, señalaron que, considerando que la ley de Etiquetado Frontal de Alimentos entra en vigencia en los próximos días, el programa Comer Mejor también tiene como propósito informar y educar a la población sobre las advertencias o sellos negros, de forma que pueden identificar y diferenciar los alimentos en línea con lo que sugieren las guías alimentarias.
En los próximos días, el programa estará disponible en línea en el sitio www.comermejor.com.ar y en las redes sociales. Allí se difundirá información sobre cada uno de los grupos de alimentos y el etiquetado frontal, así como diferentes tips, sugerencias y recetarios de preparaciones que ejemplifican los conceptos en que se basa Comer Mejor.
“Lo que más se consume es harina de trigo, los panificados, los fideos, el arroz blanco, azúcar y bebidas azucaradas", dijo Cormillot
El doctor Alberto Cormillot (MN 24.518) puso en contexto el informe al señalar qué significa “comer bien”. “Comer bien significa comer siguiendo una combinación de alimentos. Todo lo que sale de la tierra sin procesar, que son frutas, verduras, legumbres, granos integrales, semillas, frutos secos y especias, consumir mucho de eso. Todo lo que sale del mar, consumir mucho de eso. La parte magra de la vaca y su producto, de ser posible los lácteos y los quesos descremados. Todo lo que sale de la gallina, su carne y el huevo. Y básicamente, evitar la sal. Eso es a grandes rasgos”.
Por eso, “si uno hace una variedad de todos los alimentos y combina estos grupos va a tener una alimentación variada y posiblemente completa”, remarcó el médico especialista en obesidad y dierector de la Clínica de Nutrición y Salud que lleva su nombre. “Pero lo que más se consume es harina de trigo, los panificados, los fideos, el arroz blanco que, comparado con el arroz integral, tiene pocos nutrientes, azúcar y bebidas azucaradas, papas y carne que tiene un componente positivo, pero se consume muchas carnes grasas”, lamentó.
La conclusión de los especialistas que presentaron el plan Comer Mejor es que los argentinos tienen una dieta monótona en cuanto a la elección de sus alimentos, ya que “el 80% del consumo energético proviene de 40 productos sobre un total de casi 400 reportados en la encuesta ENGHo 2017/18″.
La población de menores posibilidades económicas presentaban el mayor déficit en el consumo de los 5 grupos de alimentos
“La escasa variedad en la dieta se acentúa en los hogares de menores ingresos”, según el análisis realizado que destacó las “brechas alimentarias” existentes por déficit y por exceso, según el nivel socioeconómico de los participantes de los relevamientos analizados.
De esta forma, en cuanto a la “las brechas alimentarias por déficit”, que es la diferencia entre los consumos recomendados y lo que realmente consume el adulto promedio, se destacó que el quintil de población de menores ingresos tuvieron una falta más notoria de los 5 grupos de alimentos considerados: verduras, frutas, legumbres, lácteos y frutos secos y sus derivados.
Los 5 quintiles de población según sus ingresos que fueron tomados por los autores del estudio siguieron casi en forma pareja el aumento déficit. Así, la población de menores posibilidades económicas presentaban el mayor déficit en el consumo de los 5 grupos de alimentos y esta carencia iba disminuyendo a medida que aumentaba el nivel de ingresos económico. Estos niveles mostraron una diferencia más marcadas en torno al consumo de frutos secos como nueces, almendras y aceites naturales, donde el quintil de mayores ingresos mostró un consumo incluso más alto del recomendado.
La población de menores posibilidades económicas presentaban el mayor déficit en el consumo de los 5 grupos de alimentos y esta carencia iba disminuyendo a medida que aumentaba el nivel de ingresos económico (iStock)
A la hora de analizar las brechas alimentarias por exceso “también muestran una escala creciente a medida que aumentan los ingresos, reflejando amplias diferencias entre quintiles. En el caso de las harinas, panificados, pastas y papa los excesos son transversales a todos los hogares”, puntualizó el informe. En tanto, productos como la llamada comida chatarra, los sectores con mejor capacidad económica se excedieron más y los de menores tuvieron menos excesos.
Los especialistas también construyeron un “top 10 de alimentos” más consumidos por los argentinos que es el siguiente:
- papa
- pan blanco
- pollo
- leche
- cebolla
- azúcar
- banana
- arroz
- fideos
- harina de trigo
“En el conjunto de los hogares un 39% realizaba una dieta de baja calidad nutricional y solo el 11% logró alcanzar valores ideales" (Getty Images)
“Las bebidas dulces y las infusiones (en particular mate dulce) lideran el consumo de azúcar en la dieta, seguido de galletitas”, remarcaron.
Respecto de la calidad de la dieta, que refleja la adecuación conjunta de energía, nutrientes a promover y nutrientes a limitar, el análisis lo realizó CEPEA sobre la base del Índice de Densidad de Nutrientes. “En el conjunto de los hogares un 39% realizaba una dieta de baja calidad nutricional y solo el 11% logró alcanzar valores ideales (alta calidad nutricional), de manera muy homogénea en todos los niveles de ingresos. El problema de calidad de dieta es muy significativo en la población argentina”, advirtieron los expertos.
A la hora de analizar los alimentos más consumidos por los argentinos y que son un buen aporte para una dieta, el informe enumeró:
- papa fresca
- pan blanco
- pollo
- fideos secos
- harina de trigo
- huevos
- empanadas y tartas
- queso
- asado
- carne picada, entre otros
“Es muy significativo que casi el 40% del puntaje positivo en calidad de dieta se origine en harinas, panificados, papa, carnes grasas o quesos, todos ellos alimentos que efectivamente tienen buena densidad de nutrientes, pero más calorías que los mejores alimentos (verduras, frutas, legumbres, lácteos)”, destacaron los expertos.
Las bebidas azucaradas se encuentran entre las más consumidas, en el grupo de los alimentos bajo valor nutricional
En cuanto a los principales productos que aportan un puntaje negativo a la dieta, enumeraron:
- azúcar
- galletitas dulces
- gaseosas
- arroz blanco
- galletitas saladas
- mayonesas
- chorizo fresco
- jugos
- snacks
- panificados dulces, entre otros
“Es muy significativo que casi el 40% del puntaje positivo en calidad de dieta se origine en harinas, panificados, papa, carnes grasas o quesos, todos ellos alimentos que efectivamente tienen buena densidad de nutrientes, pero más calorías"
“El ránking de alimentos que aportan puntaje negativo de calidad de dieta está liderado por tres productos cuyos consumos son elevados en la dieta. Es significativo que el cuarto alimento sea el arroz común, cuyo atributo negativo está representado por un alto contenido de alimidón y casi nulo aporte de fibra”, remarcaron.
Infobae