Salió a la luz detalles del nuevo proyecto que atenta contra los intereses de soberanía argentinos. Por qué nadie habla de esto y qué busca Reino Unido.
La importancia que el Reino Unido le da a las Islas Malvinas se ve reflejada en la creciente militarización del territorio reclamado por la República Argentina. Los ejercicios y maniobras, que refuerzan su capacidad operativa en el Atlántico Sur, se deben a que buscan defender y explotar sus recursos naturales sin consecuencia. ¿Por qué hay silencio sobre el tema?
El licenciado en Ciencia Política por la Universidad de Buenos Aires (UBA), José Cruz Campagnoli, advirtió en la AM 750 sobre el megaproyecto de extracción de hidrocarburos en islas que involucra a una empresa israelí y una británica. "Es una actitud violatoria de nuestra soberanía", definió.
Las Islas Malvinas, la meca del petróleo
La explotación offshore también se configura como otro de los grandes negocios de los que Argentina quedó excluida. El yacimiento petrolero Sea Lion, descubierto en 2010 en la Cuenca Norte, a 220 kilómetros de las islas, posee un potencial de producción estimado en 200.000 barriles diarios, lo que representa casi la mitad de la producción actual de Vaca Muerta.
Las autoridades británicas en Malvinas otorgaron licencias de forma unilateral, sin reconocer la jurisdicción argentina. De este modo, empresas como Rockhopper Exploration, Navitas Petroleum y Chrysaor avanzaron en la explotación de un recurso argentino.
Campagnoli señaló que el proyecto de la compañía israelí Navitas Petroleum, en asociación con la británica Rockhopper Exploration, “prevé la extracción de 300 millones de barriles de petróleo en 30 años, con una ganancia estimada de 25 mil millones de dólares”. “El Gobierno británico también obtendrá otros seis mil millones en concepto de regalías, privando a la Argentina de nuestros propios recursos”, agregó.
Asimismo, indicó que la empresa Navitas cuenta con una licencia ilegal "otorgada por el Gobierno kelper de Puerto Argentino”. Esta empresa anunció que a fines de 2026 iniciará la explotación de crudo en la parte norte de las Islas Malvinas.
La empresa israelí Navitas Petroleum es quien tiene en su poder la mayoría de los derechos de explotación sobre ese territorio con el 65% de las acciones del proyecto, el resto es de la británica. De concretarse la operación, la mayor parte de las ganancias irían a los accionistas en Israel y Estados Unidos, precisó el medio británico The Telegraph.
La falta de presión diplomática y de sanciones económicas efectivas por parte de Argentina permitió que la situación persista sin modificaciones sustanciales.