La tormenta golpeó con fuerza al Hospital Interzonal Dr. José Penna, donde el agua ingresó a la sala de neonatología, obligando al personal a actuar de inmediato para poner a salvo a los recién nacidos.
Luciana Marrero es una de las enfermeras que lograron rescatar a 12 bebés que se encontraban en la sala inundada de neonatología del Hospital Interzonal Dr. José Penna. Al encontrarse en el subsuelo, el agua ingresó y llegó hasta las incubadoras, donde se encontraban los bebés.
Luciana salía de trabajar a las seis de la mañana, pero como no pudo volver a su casa, decidió regresar al hospital. Ahí fue cuando encontró a sus compañeras trasladando a los bebés a otras áreas.
“Cerca de las 17 hs. aproximadamente, porque perdimos la noción del tiempo, nos vino a buscar la ambulancia, pero no pudo pasar porque había un 1,60 m de agua. Al final, un camión del ejército nos trasladó hacia la Clínica de Empleados de Comercio”, explicó Luciana.
Y agregó que los bebés llegaron bien y que, en este momento, están con los cuidados que necesita un bebé prematuro.
El agua inundó todo el subsuelo del hospital. Se perdió todo el servicio de neonatología, dado que se mojaron las incubadoras, los motores y los medicamentos. Pero también se inundaron otros servicios que allí se encontraban como el laboratorio, la terapia de adultos, el lavadero, el depósito y el comedor. “No tenemos nada. Es un volver a empezar”, expresó Luciana.
DE UNA