Una causa con 45 cuerpos, 50 anexos, una recompensa de 5 millones y Julio López sigue sin aparecer

Rubén López, hijo de Julio López, dialogó con DE UNA luego de que la justicia no de respuestas en cómo se encuentra la causa de la desaparición de su padre. 

“Se han cumplido 18 años, a lo largo de estos años hemos tratado de generar distintas acciones para no ser reiterativos y en estos últimos días he realizado acciones como presentar un libro, estar en una facultad imponiendo un mural en el rectorado. Queremos generar la conciencia de que hace 18 años falta alguien que fue determinante en la condena de Etchecolatz por genocidio, es una herida de la democracia, no es el único desaparecido en democracia, pero es particular su situación”.

Julio López fue desaparecido dos veces en la dictadura sufrió torturas, estuvo en distintos campos de concentración, y luego desapareció en democracia hace 18 años por ello desde hace 18 días su hijo lleva adelante un reclamo social, cultural, “y terminamos el reclamo frente a Tribunales donde esta la causa de Julio López porque queremos saber qué pasó, sabemos que no hubo muchos avances, ni siquiera tenemos una hipótesis real y desde hace 18 años y un día no sabemos qué pasó con mi padre”.

Rubén López en diálogo con DE UNA expresó que cree que los que deben investigar son los jueces y fiscales y esos deben pedirle las herramientas al gobierno que administra el Estado, “pero el Estado no se debe meter.

las desapariciones de personas son engorrosas, y siempre termina habiendo violencia institucional, siempre alguien del Estado está”, por ello planteó que debería haber una democratización de las policías y de que hubiera un control civil de cómo se manejan porque todos los días se ve violencia institucional.

Rubén López comentó que la causa de su padre cuenta con 45 cuerpos y 50 anexos y aún no se han dado respuestas.
“Se ha investigado mucho, incluso a nosotros, el problema es que hay mucho papel, mucha escucha de teléfono, pero no hay nada que de las respuestas de qué pasó con mi padre. Incluso hay una recompensa económica de 5 millones de personas, pero el pacto de silencio es tan grande como lo que pasó en la dictadura”.



DE UNA